Irán, la Persia clásica
Irán es uno de los destinos más cargados de historia que uno pueda conocer.
Es conocida por ser la cuna de la civilización occidental y tierra de paso de una gran variedad de culturas y pueblos. Su situación geográfica y las grandes reservas de petróleo que yacen en el subsuelo hacen de Irán una pieza clave en el tablero de las relaciones internacionales. Por suerte, en los últimos años las diferencias con otras potencias y estados se resuelven de manera pacífica y negociada, dejando atrás episodios oscuros de su historia.
Ahora Irán es un destino muy apetecible para los viajeros que quieran sumergirse en su idiosincrasia y conocer sus ciudades más emblemáticas. También para aquellos otros que buscan pisar un oasis rodeados por el desierto, con algunas de las grandes muestras de arquitectura islámica y una población culta y hospitalaria, que sorprende al viajero en Ishahán, Yadz o en la ciudad de Shiraz.
En Persépolis esperan impresionantes restos del antiguo imperio Persa. Palacios y relieves en piedra que nos hablan de personajes legendarios como Jerjes, Dario I o Alejandro Magno.
Pero es en la capital, Teherán, el lugar en que la tradición y los tiempos actuales se mezclan en el día a día; confrontación de dos civilizaciones que conviven. Su antiguo bazar con más de 10 km. de callejones, patios y tiendas y museos del Sa’d Abad: conjunto de 18 palacios y antigua residencia del Sha. En sus calles, escaparates, plazas, se palpan los dos ambientes, cohabitando en dos eras diferentes a la vez y que coinciden en el presente al viajar a Irán.
Fuente: Viatges Tuareg